Parashat ha'Shavúa , 28 Adar-II, 5768
Shabbat Shalom MeHa'Hillel sheKayam lifne sheHayu Batei Hillel.
Shabbat Shalom desde la primera casa de Hillel de los EE.UU.
________________________________________________________________________________
La parashá para esta semana se llama "Tazriá" (Levítico: 12:1-13:59) y es una de las secciones semanales que mucha gente preferiría evitar. Principalmente trata del concepto difícil que comprender de "tumá" que aparece en su forma de adjetivo: "tamé." (de la raíz verbal: tet, mem, alef) Muchas veces se la (mal) traduce en castellano como: impuro, no limpio, prohibido o hasta "contaminado." La Biblia la emplea para referirse a muchos sucesos en la vida humana y entre ellos encontramos la menstruación y el parto
Leyendo el texto en un idioma extranjero muchos "sabios" han atacado esta sección diciendo que muestra un través anti-femenino o hasta primitivo. Trágicamente estos ataques demuestran su ignorancia del idioma hebreo y un sentido de arrogancia académica. Éstos tienen su base no solamente en la ignorancia sino también en la creencia falsa que lo que hubiera en el pasado es siempre inferior a lo que haya en la actualidad.
Un análisis más profundo del adjetivo "tamé" nos ofrece un significado muy distinto. El texto hebreo usa este adjetivo para describir un suceso de la vida temeroso. Por ejemplo, el parto y la muerte son momentos en la vida que nos dan miedo. También una enfermedad grave o hasta la primera vez que una joven trata de su menstruación nos hacen temer. Nuestros idiomas occidentales simplemente carecen de un adjetivo para describir la combinación de miedo físico con el alejamiento espiritual. Estar tamé no es anormal, mucho al contrario, es un sentimiento que todos conocemos durante la vida.
Estar "tamé" describe el sentimiento que tenemos cuando sufrimos un cambio brusco en el ritmo del a vida. Estar tamé no es estar impuro sino sentirse como si nos fuéramos al trace, como si estuviéramos cayendo en un pozo sin fin. La Biblia se da cuenta de que a veces todos nos sentimos "tamé" En vez de darnos vergüenza o pedir que escondamos este sentimiento, la parashá nos enseña a tratarlo
La cuestión principal de esta Parashá es cómo regresamos a un estado de "tehorá) (adjetivo: tahor que es el antónimo de tamé. Estar tahor es estar en un estado de unidad consigo mismo y con D'os, de volver a los ritmos de la vida). La sección actual nos sugiere que es el rol de la religión y la espiritualidad de ayudarnos a volver a un estado de tahorá por medio de los rituales de la comunidad. En la actualidad muchas veces estamos dejados a sentirnos solos y aislados. ¿No nos beneficiaría si comprendiéramos mejor el significado de estos adjetivos y si desarrolláramos un método comunal para ayudarnos sanar durante los trances de la vida?
Rabbi Peter Tarlow