Día Internacional del Holocausto
Día Internacional del Holocausto 63 años después de Auschwitz
El 27 de enero se celebra el Día Internacional de Conmemoración de las víctimas del Holocausto, que coincide con el 63º aniversario de la liberación del campo de concentración de Auschwitz. Donde empezó todo.
Fue en el comedor con vistas al lago de esa villa donde, durante una reunión de 90 minutos seguida de un desayuno, 15 altos representantes de las SS, del Partido Nacionalsocialista (NSDAP) y diferentes funcionarios ultimaron los detalles de la deportación y del exterminio de los judíos de Europa.
La reunión, que tuvo lugar un nevado 20 de enero de 1942, fue convocada y presidida por Reinhard Heydrich, jefe de la Oficina Central de Seguridad del Reich (RSHA), y Adolf Eichmann, encargado de organizar las deportaciones de judíos al este, redactó las actas de la misma.
Un lugar idílico
La belleza y la tranquilidad del lago de Wannsee atrajo a la cúpula nazi.
Josef Goebbels, Walther Funk, Hermann Esser, Wilhem Stuckart y el médico de Hilter, el doctor Morell, tenían casa allí.
El arquitecto de la Casa de la Conferencia de Wannsee fue el mismo que diseñó la cercana villa del pintor judío Max Liebermann, paradigma de la "otra" Alemania, tolerante y liberal, que sufrió también la persecución nazi.
La "solución final"
El Protocolo de Wannsee, una de cuyas copias fue encontrada en 1947 con el sello de "cuestión secreta del Reich" entre los documentos del Ministerio de Asuntos Exteriores, prueba con pavorosa claridad y con lenguaje burocrático el plan para el exterminio de los judíos europeos y la participación activa de la administración en ese genocidio.
La solución final de la cuestión de los judíos era un eufemismo que utilizaron los nazis para referirse al plan para asesinar a todos los judíos europeos.
El crimen masivo mejor documentado.
El Protocolo de Wannsee es considerado por algunos historiadores "la piedra Rosetta del crimen nazi" y "quizá el documento más vergonzoso de la historia moderna", explica Mark Roseman en su libro "La villa, el lago, la reunión.
Wannsee y la solución final".
Roseman asegura que probablemente el Holocausto es "el crimen masivo mejor documentado de la historia".
"A través de esta conferencia el conjunto del aparato de Estado alemán se convirtió en cómplice del genocidio de los judíos", afirma Nobert Kampe, director desde 1996 de la Casa de la Conferencia de Wannsee.
La nueva exposición permanente se ha visto enriquecida gracias a las últimas investigaciones realizadas por historiadores que han tenido acceso a archivos del este de Europa tras la desintegración de la Unión Soviética.
La muestra no se centra sólo en los 90 minutos que duró la conferencia de Wannsee y en sus protagonistas, sino que también explica la difusión de teorías racistas y antisemitas en el siglo XIX y XX, las leyes de Nuremberg y la llegada de Adolf Hitler al poder en 1933.
En la Casa de la Conferencia de Wannsee se puede ver en una pantalla de televisión, por ejemplo, el discurso que pronunció Hitler en el Reichstag el 30 de enero de 1939 en el que hizo "una profecía: la aniquilación de la raza judía en Europa".
Los participantes en la Conferencia de Wannsee esperaban aplicar "la solución final" a once millones de judíos en Europa.
Seis millones de judíos fueron víctimas del Holocausto.