REFLEXION DIARIA JULIO 13, 2005
Crecer es aceptar todos los gestos salvadores de Jesucristo; estos gestos son los sacramentos, actos de Cristo Salvador, repetidos perpetuamente por la Iglesia, mientras haya hombres, que nacen y que mueren.
Ya ves: creer es orar, creer es "practicar" en el buen sentido de la palabra; un creyente que no practica se convierte en una verdadera paradoja viviente, en una contradicción consigo mismo, en un desgarramiento interno, que lo ha de torturar, porque al mismo tiempo dice SI y luego dice que NO.
Si: yo creo que Dios ama al hombre y le ha enviado a Jesucristo para que sea su Salvador.
No: actúo como si Dios no amara a los hombres como si no me amara a mí.
Por cierto que un gesto exterior, un rito puede ser una cosa sin sentido y sin razón, pero lo lógico no es dejar de poner ese rito, sino ponerlo con toda la vida inerior, que lo hará vivo y vivificante.
Los cinco minutos de Dios de Alfonso Milagro
Silvia Mónica del Rio
San Guillermo-Santa Fe-Argentina