27 de julio 2005, ángel
Mi querido Ser Humano, te has pasado estos últimos doce meses pelando una por una las capas de la cebolla, para convertirte en maestro por derecho propio, por auténtico derecho. El año pasado atravesaste por alguna de las más difíciles experiencias personales, algunas de las más profundas de tu vida. A nuestra manera, nos afligimos por ti. También nos alegramos al saber que has atravesado todo eso. Los desafíos que enfrentarás de aquí en adelante serán de un tipo diferente. Serán desafíos personales en el interior de tu ser. No será tanto lo que llegue del exterior. No tendrás tanto la sensación de estar emocionalmente dividido, cosa que has sentido durante este último año. Has atravesado por cosas difíciles. Has llegado hasta este punto, en este ungido día, en que estás en el aula de la nueva energía espiritual de la Tierra. Es posible que sientas un olor, una fragancia suave que entra ahora. Es dulce. Es un recordatorio, estimado Ser Humano. Es nuestra forma de acariciarte.