Desde la puesta de sol de domingo (1/o de oct) hasta la de lunes, el mundo judío observa su día más sagrado. Yom Kipur es mucho más que un ayuno o una solicitud a D'os para que nos perdone. Es una oportunidad a enfrentarse a sí mismo, a examinar sus relaciones interpersonales y colocarse dentro del contexto espiritual de la eternidad.

Yom Kipur es un día que refleja las paradojas de la vida. Al enfrentar al enterno Yom Kipur nos enseña que somos significantes y a la vez insignificantes; que formamos una parte de la corriente de la vida y que la vida continuará sin cualquiera de nosotros. Yom Kipur nos hace enfrentar el hecho que nuestras acciones impactan la vida, pero nunca debemos tomarnos con demasiada seriedad.

Este es el día que pedimos perdón y nos damos cuenta de que todos hacemos nada más que un pequeño papel en el plan divino de la eternidad, y a la vez dentro de cada uno de nosotros se encuentra la totalidad de la majestad de la creación, llamada la chispa divina. Así somos una combinación de la totalidad de lo sagrado compuesta de nada más que mero polvo y cenizas, carne y hueso.

Yom Kippur nos exige que nos comportemos como adultos ante el "Juez de los Jueces" y que confesemos nuestros pecados, sean personales o colectivos. Nos hace recordar que sólo somos nosotros capaces de corregir nuestros errores.

Este no es un día fácil. Su ayuno nos lleva a los limites de nuestra capacida física y nos recuerda que hasta los más fuertes somos seres fragiles en los ojos de D'os. El mensaje espiritual es aún más dificil que vivir.  Nos exige que examinemos la totalidad de nuestra vida, que nos demos cuenta de nuestros fallos y que no solamente nos esforzamos de mejorar sino que estemos listos para perdonar los errores ajenos.

El acto de perdón (teshuvá) en el judaismo no es fácil. Solo está dado a los que  de veras se dan cuenta de sus errores, están dispuestos a cambiar el rumbo de su vida y empezarla de nuevo. Esto no es nada fácil, pero Yom Kipur no es un día fácil tampoco.

Con la esperanza que en este día de Yom Kipur su ayuno sea fácil y sus pensamientos sean profundos.

Reglas para el ayuno

Los niños de bajo de 10 años de edad no ayunan, los de 11 y 12 años ayunan solamente entre la cena y el desayuno, los de 12 no comen desayuno, y con 13 años ya ayunan como adultos.