6 de octubre, ángel

Había un trabajador de la luz, Shaumbra, que se llamaba David. David leía estas lecciones. Había estudiado el material. Trabajaba en todas estas cosas. Y David batallaba con muchos de los conceptos. A veces llegó al muro ¡e incluso a veces se salió del Círculo Carmesí y se dijo que esto no era para él! Estas lecciones no siempre le hacían sentir cómodo, porque eran difíciles. Pero David regresaba a esta energía, porque comprendía, a los niveles más profundos, que esta era la energía de CASA. David es un humano, un humano aprendiendo a integrar su divinidad con todo lo que él es. David tiene una esposa y dos hijos. Tiene un trabajo regular y tiene facturas, tiene muchos anhelos y deseos, el primero de ellos es llegar a estar al servicio del Espíritu. Hay cosas de su trabajo que a David no le gustan. Quisiera que le pagaran más y quisiera no tener que trabajar en cierto departamento. No se lleva demasiado bien con algunas personas. No le gusta el hecho de tener nada más que tres semanas de vacaciones. Hay muchas cosas asociadas con el lugar en que trabaja, pero tiene que soportarlas. Coopera lo mejor que puede, pero hay días en que todo esto llega a afectar su energía. David también tiene algunas dificultades con su esposa. Hay cosas en las que no están de acuerdo. Y con sus hijos... quisiera que sus hijos fueran mejor en la escuela. Quisiera que su hijo fuera más deportista. Pero su hijo no lo es. David quisiera que su hija fuera un poco más atractiva. Sería más fácil para que se casara, piensa él, con que sólo se pareciera un poco más a su madre... David tiene muchas agendas, muchas programaciones. Tiene muchos problemas. Hace uso del conocimiento y la iluminación que ha alcanzado y trata de arreglar las cosas a su alrededor, en casa, en la oficina. Incluso utiliza esta energía cuando compra un billete de lotería. Trata de usar esta energía para controlar el resultado y ganar en la lotería. ¿Puedes creerlo? (Risas). David llegó a un punto en que se sentía muy frustrado consigo mismo. Dudaba de quién era. Se adentraba en la Nueva Energía, sentía cómo brotaba su divinidad desde su interior, pero seguía frustrado consigo mismo. Sentía que no podía controlar las cosas a su alrededor, que no era capaz de usar su poder para manipular o cambiar las cosas de su alrededor. David entró en una gran depresión, una profunda depresión. Estaba montado en una difícil ola menguante y mientras la remontaba, trataba de hacer cualquier cosa para salir de ella. A David le gustn las grandes olas. Le gustan los ciclos de altura, pero no los inferiores. No le gustan en absoluto. David que tenía tantas ideas acerca de cómo DEBERÍAN ser las cosas en la vida y en su interior, ideas preconcebidas basadas en la Vieja Energía de la dualidad. ¿Y qué estaba encontrando? Encontraba que se había topado con el muro. Las cosas no eran de la manera que él pensaba que serían. De vez en cuando había una lucecita de esperanza y las cosas funcionaban y pasaba un día tranquilo. Pero al siguiente la frustración, la depresión y la duda regresaban a atormentarle. Había un sentimiento de insatisfacción. Un sentimiento terrible. David, sin saber qué camino tomar, nos llamó hace poco. Dijo "Querido Espíritu, queridos Metatrón y Tobías" -en realidad no me dijo 'querido' porque estaba enojado conmigo- "¿Y Ahora qué hago? ¿Para dónde sigo? ¿Por qué no tengo ese sentimiento de satisfacción, felicidad y alegría que verdaderamente me gustaría sentir?" Lo que le dijimos fue que la semilla de la energía de la Lección Siete ha ido creciendo. Y esa es la razón por la que ha estado pasando por dificultades durante las últimas semanas. Lo que le dijimos a David fue... NO TENGAS AGENDA.Lección Siete de la Serie de la Ascensión "LIBÉRATE DE LA AGENDA". O, como nos gusta decir aquí, "No, no a la agenda". (Risas). Y debo decirte que este humorismo viene directamente de Metatrón. Está practicando cómo ser un humano gracioso (más risas).