Ahora Lección Tres: “Vive en el Momento Divino�?. Ve y colócate tras el murito de tu nueva casa, aceptando todas las cosas como son, aceptando la perfección de tu yo humano, y vive en el momento divino. Frena todas tus preguntas... ¡pasa un tiempo en el momento divino y verás lo que sucede! Nosotros te ayudaremos a entender más de la física de esto. Cuando estás en el momento divino hay un nuevo tipo de vibración que emana de ti. Ella atrae todas las cosas apropiadas para ti. En el pasado tuviste que buscar esas cosas para atraerlas a ti, buscar tu abundancia, buscar tu felicidad, buscar a tu pareja. Tuviste que ir al vacío de un futuro que no existía y crear una realidad dentro de él. Así es como la realidad fue formada en la Tierra, ahora como nuevo creador irás descubriendo una nueva manera. Vamos a usar una metáfora para ayudarte a entender esto. Imagínate que dentro de ti hay un diapasón con dos puntas hacia abajo. En la vieja energía cada una de las puntas ha estado vibrando por su cuenta. Cada una representa un lado u otro de la dualidad. Por eso son dos. Han estado vibrando desfasadas. Han estado vibrando en diferentes frecuencias. Esto fue intencional y fue así para que pudieras experimentar la dualidad, para que pudieras experimentar los efectos de luz y oscuridad... tenían vibraciones diferentes que intencionalmente causaban una fricción entre ellas. ¡Y luego te preguntas por qué a veces tu vida fue difícil!. Esta fricción vibratoria, esta vibración desfasada, fue establecida deliberadamente para experimentar, para comprender y para jugar este juego de dualidad que has estado experimentando, un juego que ya no es necesario para ti. Al vivir en el momento divino ya no necesitas de las dos diferentes partes de la dualidad, o de las dos diferentes puntas de tu diapasón, para estar desfasados. Al vivir en el momento divino las energías de las dos pueden regresar a la misma fase. Empezarán a resonar al mismo nivel adecuado de frecuencia. Ya no habrá la necesidad de buscar el equilibrio. El equilibrio habrá regresado al uno. El momento divino puede durar una fracción de segundo. Puede durar horas. Está aquí rodeándote, no hay necesidades o deseos. Tú eres todo lo que eres.