del 03 Setiembre, 2005
Septiembre 3
Tomás de Aquino define la paz como la tranquilidad en el orden;
y Agustín nos habla de la belleza como algo intrínseco relacionado con el orden.
Es que el orden entra en los planes del Creador.
Mira sobre tu cabeza y verás millones de estrellas admirablemente ordenadas, contempla bajo tus pies y admitirás el sabio equilibrio de todos los seres, que sirven para tu sustento o tu recreación.
Tu vida ha de ser ordenada en todo nivel, el desorden y la desorganización no pueden serte útiles, no pueden entrar dentro de los planes de Dios sobre ti.
Que el orden rija desde tus cabellos hasta tus sentimientos,
desde tus ropas hasta tus ideas, desde tus actos más íntimos hasta tus relaciones con los demás.
Sé en toda tu vida un reflejo del roden que Dios puso en la creación.
Los cinco minutos de Dios de Alfonso Milagro
Silvia Mónica del Rio
San Guillermo-Santa Fe-Argentina